Hacer cine en el Perú es una tarea muy dura de gestión, por eso saludo la designación de Salvador del Solar, que es alguien que viene del sector. Él es actor, al igual que lo es Luis Peirano, uno de los ministros de Cultura que tuvo una buena gestión. Desde la época del INC hemos tenido historiadores, arqueólogos y antropólogos, y no hemos avanzado mucho en temas de políticas culturales.
Salvador del Solar: el primer actor en asumir Cultura [PERFIL] https://t.co/KgBw6VbQII vía @elcomercio
— Alexander Ynoñán (@AlexanderPeru7) 6 de diciembre de 2016
Además, ya tiene un equipo armado y un plan de gobierno. Solo que no existe una política cultural, y eso afecta la forma de llevar ese ministerio. Creo que hará una buena gestión de las industrias culturales, que es lo que mejor maneja. Las industrias mueven audiencia y dinero, y el presupuesto público se puede destinar a otras áreas como patrimonio e interculturalidad, y hacerlo autosostenible.
La hoja de vida de Del Solar se parece al de Nieto –se han especializado en temas de interculturalidad-, así que no veo mucha distancia y no entiendo la polémica. De alguna manera esta controversia le ha dado la visibilidad que necesitaba el ministerio. Al limeño de a pie no le importa la cultura y si Del Solar logra que se interese un poco en eso, hemos ganado.
Entre las cosas urgentes a solucionar está el tema del MUNA. Que las cosas por fin se sinceren y tengamos una salida que ponga como prioridad la salvaguarda del patrimonio cultural.
Carina Moreno (periodista, gestora cultural y docente)
Me parece interesante su designación porque Salvador del Solarconoce el sector y conoce de sus problemas. He leído su hoja de vida, es un hombre muy preparado y tiene experiencia en el tema cinematográfico: creo que su perfil se adecua para asumir la gestión.
Lo que me preocupa es si tendrá las herramientas para manejar el tema de patrimonio. No lo conoce y el ministerio tiene muchas aristas. La gestión pública también lo puede ganar, es un universo complejo, pero con planificación confío en que lo puede hacer bien.
El ministro de Cultura debe ser alguien que conozca bien el sector, y sobre todo la gestión pública. En lo primero lo cumple Salvador, esperemos que también lo haga en lo segundo.
Miguel Aguirre (artista plástico)
No lo conozco personalmente, pero me dicen que es una persona muy inteligente. Ojalá bastara con esto en el Perú para hacer las cosas bien. Espero que él sea un buen gestor y tenga la capacidad de estar atento ante la complejidad de un sector como el cultural en nuestro país. Esto lo dirá o pensará todo el mundo, pero la Cultura en Perú es vastísima y sumamente compleja.
Desearía que su prioridad durante su gestión sea la de educar en y con cultura. Que los niños peruanos se acerquen a todas y cada una de las manifestaciones culturales, puede que con una alianza con el Ministerio de Educación. Veo fundamental que desde niños, los peruanos tengan las herramientas apropiadas no solo para asistir a un museo precolombino o una obra de teatro, sino que puedan nacer en ellos mismos una capacidad de análisis, cuestionamiento y crítica.
Para los temas de interculturalidad y patrimonio, puede rodearse de las personas más experimentadas. Un ministro debe contar con los mejores alrededor suyo. Él toma decisiones, está claro, pero a partir de múltiples sugerencias y opiniones. Ahí tiene que demostrar su inteligencia.
“La cultura no se come”, por Salvador del Solar https://t.co/5pp20rfquc vía @elcomercio
— Alexander Ynoñán (@AlexanderPeru7) 6 de diciembre de 2016
David Flores – Hora (historiador del arte, crítico y curador)
En medio de traficantes de órganos de niños, pishtacos, interpelaciones, ministerios del amor y demás elucubraciones; la designación de Salvador del Solar como ministro de Cultura es una de las mejores maniobras políticas del Ejecutivo.
De pronto (súbitamente), todas las miradas y todos los reflectores debaten si es pertinente la designación de un actor como ministro. Las posiciones más conservadoras encuentran inadmisible que el “Pantaleón Pantoja” de ficción pueda ser el ministro de Cultura de la realidad. Ciertamente, Del Solar tiene todos los méritos académicos que podamos exigir, y tenemos la tranquilidad que es una persona con inteligencia y sentido crítico.
Definitivamente, tiene todas las herramientas para hacer una interesante gestión, mucho mejor que olvidables gestiones como las de Juan Ossio, Susana Baca y Jorge Nieto.
Sin embargo, el problema (el verdadero problema) es que no entendemos cual es la verdadera dimensión de la Cultura (las culturas) en el aparato del gobierno. ¿Cuál es el criterio para escoger un ministro del sector? ¿Entiende el gobierno que se tiene que plantear políticas de corte nacional? ¿Cuál es la postura del gobierno con respecto a las lenguas originarias, patrimonio inmaterial, derechos culturales y mecanismos de autoafirmación cultural?